La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, ha presentado este jueves «El Descendimiento» de Caravaggio (1571-1610), la obra invitada del Museo del Prado hasta el 18 de septiembre y la gran atracción del itinerario «La palabra hecha imagen». El cuadro ha sido prestado por los Museos Vaticanos con motivo de la visita a España del Papa Benedicto XVI en agosto, coincidiendo con las JMJ 2011.
«La espiritualidad y la fe no solo pertenecen a un tipo de hombre», ha señalado la ministra, quien ha recordado el sufrimiento del pintor en vida, perseguido por una sociedad que no aceptaba su orientación sexual. «Caravaggio fue un "criminal" perseguido por la ley, un"homosexual disoluto" que no respetó ninguna convención del arte y que fue rescatado mucho tiempo después. Hoy celebramos todos su pintura y le recordamos como uno de los grandes de la historia del arte», ha añadido.
EFE
Rouco y Sinde, ante la obra
En «El Descendimiento» (1602-1604), el revolucionario maestro italiano dispuso las figuras conforme a un esquema compositivo compacto, integrado por un grupo de personajes, entre los que figuran Jesucristo, la Virgen María y María Magdalena, recortado sobre un fondo oscuro que otorga dramatismo al conjunto y da buena muestra del dolor de los seres queridos de Cristo. En el lienzo destaca, en primer término, Nicodemo, que vuelve su cara al espectador, y san Juan Evangelista. Entre los dos portan el cuerpo de Cristo, cuya mano apenas roza la losa donde debía ser lavado, ungido y perfumado, lo cual probablemente constituye una alusión al propio Cristo como piedra angular de la Iglesia. Detrás están la madre del Mesías, que guarda la compostura pese al dolor; María Magdalena, que seca sus lágrimas en un paño blanco, y María de Cleofás, que, desolada, alza las manos al cielo.
Según Gabriele Finaldi, director adjunto del Museo del Prado, Caravaggio buscaba una «nueva forma de narrar» historias muy representadas. «Todas sus obras tienen enorme impacto y lo siguen teniendo cuatro siglos después. A veces sus cuadros se comparan con el cine moderno, por su forma dramática de iluminar y la forma en que compone, como si sus lienzos fueran fotogramas», explica.
«Palabra hecha imagen»
El préstamo del cuadro coincide con la celebración en agosto de las Jornadas Mundiales de la Juventud 2011, que contarán con la visita del Papa Benedicto XVI. Por ello, «El Descendimeitno» formará parte del recorrido temático «La palabra hecha imagen», que incluirá otras trece obras maestras de temática religiosa. Durante el itinerario, el público podrá disfrutar de obras de Rubens, El Greco, Velázquez o Zurbarán, así como reflexionar sobre las descripciones metafóricas de Cristo en los Evangelios y su materialización en la historia de la pintura.
«En el itinerario, se intenta ver cómo los artistas interpretan las palabras de los evangelios. Ellos se tenían que imaginar, buscar una forma visual de describir estas palabras escritas. Queremos ver de qué forma la palabra se convierte la palabra en imagen», dice Finaldi. El itinerario estará señalizado en las salas por cartelas explicativas de carácter especial, en español y en inglés, reconocibles por el logo JMJ 2011, que incluirán información artística, iconográfica y religiosa de la obra. Todo ello, completado con un folleto gratuito y una pequeña guía de mano de venta al público.
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