Tenía unas 20 años cuando decidió centrase en escribir, pero nunca dejó de pintar. La estadounidense Sylvia Plath (1932-1963), que se cuenta entre los poetas más reputados de la segunda mitad del siglo XX, siguió dibujando como afición. The Mayor Gallery muestra ahora en Londres una selección de los dibujos la atormentada creadora, que su hija Freida Hughes heredó tras la muerte de su padre, Ted Hughes, el poeta con el que la escritora también tuvo otro vástago, que se suicidó hace un par de años.
La exposición reúne 44 pinturas y dibujos, alguno de ellos bocetos, de Plath, a quien Gwyneth Paltrow encarnó en el cine en 2004 en 'Sylvia', se quitó la vida con 30 años abriendo la llave del gas, un día de invierno de 1963. Lo hizo pocos meses después de separarse de su marido, que le abandonó por otra mujer que también acabó suicidándose. Su muerte convirtió a la poetisa en mito literario y feminista.
Los dibujos, que la hija de Plath ha puesto a la venta, los realizó durante su luna de miel con Hughes, cuando ella tenía 23 años y celebraron su matrimonio viajando a París y visitando España. Son obras que recogen calles, animales, flores, cafés, casas... Es la primera vez que se muestran en público estas obras de Plath, que fue galardonada con un Premio Pulitzer, a título póstumo, en 1982. La exposición podrá visitarse hasta el 17 de diciembre.
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